En ellos, con la paciente esperanza del sembrador, sembramos los valores más deseables para el alma:

• Respeto: para que se respeten a sí mismo y a los demás.
• Tolerancia: para que sepan aceptar al otro como es.
• Solidaridad: para que se comprometan con el servicio a quienes los necesitan.
• Responsabilidad: para que puedan tomar decisiones libres.
• Honestidad: para que puedan reconocer todas sus posibilidades y orientarlas para el bien de muchos.
• Justicia: para que sean defensores incansables de la dignidad de la persona.
• Igualdad: para que descubran lo esencial de cada uno conforme a sus necesidades.
• Amor: para que desarrollen un gran corazón y puedan vivir en plenitud el don de la vida.

                     Bases y condiciones del concurso

                   "Derechos todo el año"

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